lunes, 16 de julio de 2012
Anhelada compañera
Anhelada compañera, que viajas sin rumbo,
Te imagino, te sueño libre en mi mundo,
Te confundo, entre sombras perdidas,
Te busco, en cada mirada inerte y vacía.
Eres la respuesta a todas mis preguntas,
El interrogante que plantea todas mis dudas.
Si aquí estuvieras, todo lo infame cambiaría,
Si te encontrara, nuevos horizontes abrirías.
Amiga Igualdad, el poder te soborna,
Te adorna, con lujos injustos te traicionan.
Yo te pido que luches por cada ser que abandonan,
Yo te pido que aparezcas y que a todos nos acojas.
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Precioses paraules, com sempre. Estic molt orgullosa de tú, de com expreses el que sents.
ResponderEliminarContínua aixi, no decaiguis. Aquest mon necessita poetes com tú que siguin un revulsiu per a les conciencies dormides. Un petonas!!
Este poema te ha quedado bordado... Como siempre digo: la poesía no se debe perder solo en la rima, pues de ser así se torna banal; la poesía a de trasmitir, contener un mensaje, una emoción, algo que conecte a ella las neuronas de los demás... que les haga reír o llorar... enamorarse u odiar... y, como en este caso, despertar... Un abrazo.
ResponderEliminarEl primer problema de la igualdad es que todos tenemos una visión desigual de lo que es y lo que implica, ¿crees que es porque en realidad somos desiguales por naturaleza?.
ResponderEliminarEl verano es poco prolífico para publicar, ¿verdad? :)